Hola, holita 🙃
Hoy os traemos las reseñas de una de las autoras comodín del #RetoRita5, Courtney Milan #RitaMilan
¡Pasen y vean!
►►Kim ha leído: La guerra de la duquesa
Cuando leí El affaire de la institutriz ya me quedé pillada por ese final que auguraba unos buenos ratos entre "los hermanos siniestros" (llamados así no porque den mal rollo sino porque son zurdos 😂). Como nunca es tarde si la lectura es buena, tocaba retomar la serie con este libro, que nos cuenta la historia de Robert Blaisdell, el actual duque de Clermont. En la precuela conocimos a su padre, al que generosamente llamaremos "el duque joputa" porque, básicamente, eso es lo que era. Le podría haber atropellado un tranvía a los dos segundos de dejar embarazada a su duquesa pero Courtney Milan no es tan maja y lo deja vivir bastante más, lo suficiente para joderles la vida a su mujer y a su hijo y, de regalo, dejarlos enfrentados. Con el duque joputa fuera de juego para los restos, Robert hereda el ducado con un claro objetivo: no caer en los errores de su padre. Eso, además de despertarle una gran conciencia social, le hace ser lo más adorable y respetuoso del mundo. Al negarle su padre el amor de la familia, Robert vuelca esas ansias de amor en su hermano Oliver y en su primo Sebastian (en este sí que volcaba yo mis ansias de amor y mi cajón de las bragas 🔥), mientras que intenta luchar por los derechos de los trabajadores de un modo bastante perseguido ¡Un duque comunista, chica!
Bueno, tampoco es para tanto pero un poco rojeras sí es, que le gustaría abolir los privilegios de la nobleza, la explotación laboral... Como un duque mueve mucho pero no un sistema social asentado, Robert hace lo que puede mientras en su camino se cruza Minerva Lane, una discretíííísima chica, de esas que si te descuidas las confundes con el pared que empapela la habitación. Cuando Robert y Minnie se conocen, el radar de lo peculiar de Robert se dispara, ya que claramente ve que esa chica callada cuya cara está marcada con una cicatriz es de todo menos la sosita y dócil chica que dice ser. Y efectivamente Robert ahí da en el clavo sin saberlo, ya que Minnie esconde muchísimo. Tanto que ni siquiera es quien dice ser...
Si buscas unas enaguas a lo Quinn, olvídate de Courtney Milan. Ni los personajes son convencionales, ni las tramas, ni siquiera la sociedad que nos muestra. Aquí no hay bailes ni debutantes, aquí tenemos al duque menos ducal de la historia, a una protagonista extremadamente inteligente que vive como otra persona, a un hermano bastardo que no se esconde, a un noble científico... Digamos que existe la sociedad enagüil habitual en nuestras novelas y esta que la bordea, se conecta con ella pero se queda al margen. No nos centramos en las reinas del baile, sino en otros personajes que en otras historias se considerarían excéntricos o apestados (según sus capacidades monetarias y su peso en la sociedad). Al no estar ante personajes convencionales, tampoco tenemos una historia convencional. Aunque la historia de amor entre Minnie y Robert es muy bonita y emotiva, no me parece que sea lo que mueve la novela. Robert es el absoluto protagonista y, si bien en gran parte del libro su relación con Minnie tiene mucho peso, es su posición en la vida y lo que hace y deja de hacer lo que mueve la novela. El libro empieza muy bien, picándonos con la relación entre los protagonistas y la peculiar guerra que se establece entre ellos, para luego ir perdiendo algo de fuerza, dejando a Robert con un mayor peso y a Minnie como la importante secundaria en la que se apoya. Courtney Milan tiene un estilo ágil y directo, engancha unas secuencias con otras sin esfuerzo, haciendo unas elipsis temporales que a veces te birlan secuencias que te hubiera gustado leer. Vamos, que corre que se las pela narrando, lo que hace la lectura bastante rápida pero a mí a veces me ha dejado algo insatisfecha, ya que un poco de pausa y detalle a la hora de contar ciertos acontecimientos no habría venido mal. En los guarrerismos, afortunadamente, se detiene lo necesario aunque dentro de su estilo nada convencional (son secuencias 🔥 pero con cierto tono real que le viene como anillo al dedo a la novela).
He pasado un buen rato leyendo, sobre todo porque este libro tiene un protagonista que se coloca en el top de la adorafollabilidad suprema. Si os gustan los maromos beta encantadores, nada libertinos, que te dan tu espacio, que son tiernos y a los que les gustas tal y como eres a lo Bridget Jones, Robert os va a encantar. Es imposible no leer este libro sin suspirar por él y sufrir por su complicada situación. Además de aflojarte las enaguas con su modo de tratar a Minnie, te conquista cuando ves la relación que tiene con sus otros hermanos siniestros, Oliver y Sebastian (al que no puedo esperar para echarle el guante y la sábana de la cama). La relación que tienen es de esas que no quieres dejar de leer, divertida y llena de amor, sin dobleces. Los mejores ratos de la novela los he pasado con ellos (y con Violet, que espero que sea la moza de Sebastian porque son una pareja descacharrante). Minnie es un personaje más complejo que Robert y en algunos momentos me hubiera gustado que se ahondara un poco más en sus traumas y en ciertos problemas que surgen con Robert. La impresión que me daba leyendo era que Milan tenía que hacer un libro más bien breve y que no quería entretenerse mucho, por lo que se tratan muchas cosas y algunas de un modo demasiado rápido y superficial. Pero, en cualquier caso, aunque podría haber sido más de todo (profundo, dramático, largo), ha sido una buena lectura, bastante sorprendente y entretenida que me ha dejado con ganas de más (y de seguir con la saga).
3.5/5 para esta precuela de una serie de libros.
Conseguí este libro en una oferta y aprovecho para leerlo para el #retorita5 , como comodín este mes de agosto.
La verdad es que ha coincidido que he leído varias precuelas de libros o series de libros durante estas últimas semanas y esta historia me ha parecido la más completa entre ellas. Tenemos un relato completo de una historia de amor aunque con el problema que su falta de longitud no permite el desarrollo necesario de la trama, que creo que daba para bastante más.
Tampoco han ayudado los fallos en la traducción; si se han equivocado en el año (1935 en lugar de 1835...) no quiero pensar en otros errores que se me hayan podido pasar....
►►Isa ha leído El affaire de la institutriz | Los hermanos siniestros #0.5 GR
Quizá 2 y medio.
Novela corta de CM, bien escrita, apasionada.
Lo bueno: personajes comunes, nada de lores ni ladies. Candente. La chica la tiene clara.
Lo malo: el chico... Si no fuera por él serían por lo menos 4 estrellas. Pero su actitud... fea. Podría haber actuado de otra forma y que ella lo presionara. Directo al psicólogo. Como mínimo.
Me ha gustado mucho esta precuela de la serie. Es una historia corta, pero no le ha faltado de nada. Hugo Marshall es el hombre que le hace el trabajo sucio al duque de Clermont, pero cuando se tiene que “encargar” de librar al duque de la molesta presencia de una institutriz que le pide que arregle el mal que ha hecho, no espera encontrarse con Serena, una joven que no se deja amilanar por el duque ni por Marshall, cuya fama es de ser despiadado y muy eficaz. Me ha gustado cómo se va dando la relación entre Hugo y Serena. Ella demuestra que es valiente y tenaz, y que sus problemas sólo la impulsan a seguir adelante y reclamar lo que es justo. Hugo, por su parte, demuestra más moral y nobleza que su empleador. Ha sido una pareja con química y que evoluciona al amor algo rápido, pero es que tiene pocas páginas, aunque eso no le ha restado nada. Me ha gustado mucho el estilo de la autora y me apetece mucho seguir la serie. Ha sido un muy buen comodín para el Rita 😍😍.
Novela corta de CM, bien escrita, apasionada.
Lo bueno: personajes comunes, nada de lores ni ladies. Candente. La chica la tiene clara.
Lo malo: el chico... Si no fuera por él serían por lo menos 4 estrellas. Pero su actitud... fea. Podría haber actuado de otra forma y que ella lo presionara. Directo al psicólogo. Como mínimo.
Tenemos puntos destacables: la protagonista es inglesa pero asiática; el protagonista es de padre inglés y madre china; nadie sabe que él es duque y dueño de toda la aldea.[...]
Chloe Fong vive en una pequeña comunidad, es una joven decidida, independiente y muy unida a su padre, junto a él tienen el firme propósito y sueño de conseguir una salsa que los saque de la pobreza y se haga famosa.
Una de sus principales manías es hacer una lista para todo. Y, justo esa es la excusa de la que se sirve Jeremy para enredarla.[...]
Jeremy es un personaje con un encanto especial. Lo más interesante ha sido ese conflicto interior entre lo que quiere y lo que debe motivado por esa diferencia de culturas, la británica, exigente, seria y estricta y la asiática, algo más indulgente y, más importante, acorde con su propia personalidad. Era un punto del que me esperaba algo más ya que la autora no llega realmente a profundizar del todo. Desde el principio queda muy patente por cual de las dos se inclina él.[...]
Y dejando de lado que el gran momento del subidón, ese clímax final, no llega nunca, que la autora —si bien refleja el día a día de la comunidad, un poco las diferentes formas de pensar de ambas culturas— tampoco es que profundice en sentimientos internos; ni en luchas personales ni tan siquiera con la diferencia que pueda conllevar las diferentes culturas en las que ambos han vivido, todo al final ha sido un poco como un jarro de agua fría y me he quedado esperando esa originalidad que tanto me ha gustado en las otras novelas que he leído de la autora.
Pues no me quejo de mi lectura! Fue bastante entretenida, el maromo es estupendísimo y el resto de los hermanos siniestros tiene pintaza, así que seguiré con la saga!
ResponderEliminarBesotes!
Tendré en cuenta estos libros, besos y buen post
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