Diez lecciones para dar caza a un lord... y que te adore, Sarah MacLean | Love By Numbers #2

 

Diez lecciones para dar caza a un lord... y que te adore

Sarah MacLean

400 páginas

Versatil

Precio: 18'95€ // 5'80€ (edición digital)

Goodreads

Reconozco que ya me habían advertido más o menos acerca de este libro para que no me hiciera unas ilusiones que me quedaran preciosas y luego me llevara el chasco (que básicamente es justo lo que me ha pasado).

Y es que Nick, el prota de este segundo libro de la serie, prometía tantísimo salseo cuando lo conocimos en la historia de su hermano gemelo, que una va con las emociones a flor de piel y deseando encontrarse en las páginas con un maromo de esos que nos vuelven tan locas (si no como su hermano, al menos parecido).

Pues bien, siento mucho decir que en esta ocasión va a ser que no.

Tengo la sensación de que la señora MacLean debió escribir este libro en plena resaca "escrituril" del anterior y que la grandiosidad de Ralston y Callie aún estaban muy presentes en ella, porque de otro modo no me explico qué ha podido fallar en esta historia. Yo desde luego, he echado de menos esa chispa mágica que hace mantener el interés en la lectura.

Lady Isabel Townsend es hija de un Duque y desde hace años se ha visto obligada a salir adelante sola además de cuidar de su hermano pequeño, puesto que su padre era un derrochador y un degenerado que malgastó toda su fortuna en juergas y apuestas y que al final terminó por abandonarlos. Tampoco gozó nunca del cariño de su madre, ya que ésta siempre la culpabilizó por el abandono de su marido. 

Lo único que le queda a Isabel  es la propiedad en la que vive junto a su hermano, James. A cambio de un poco de ayuda y trabajo en la casa, Isabel les da cobijo a mujeres que están pasando graves apuros y que están necesitadas de techo y comida. Son mujeres que por distintas situaciones, se ven prácticamente en la calle y la protagonista las ayuda porque es incapaz de dejarlas desamparadas.

Sin embargo, se acercan tiempos muy complicados, ya que la situación económica de Isabel es precaria y no sabe qué hacer para sacar adelante a todas las personas que tiene a su cargo y salvar su casa. 

Nicholas St John es un apasionado de las antigüedades. Experto en las estatuas griegas, ha viajado muchísimo a diferentes lugares del mundo con el objetivo de estudiarlas y hace poco que una revista londinense lo ha nombrado el soltero más codiciado, por lo que las mujeres están deseosas de atraparlo. 

El destino será el encargado de cruzar el camino de Lady Isabel con el de nuestro Nick, cuando por diversas circunstancias que él está investigando, llegue a su casa buscando a alguien y entonces ella aproveche la ocasión para pedirle que examine su colección de estatuas con el fin de venderlas, ya que es lo único que le queda de valor y así poder salir del apuro en el que se encuentra.

A mi parecer, llegados a este punto, el libro se estanca y la autora solo da vueltas y vueltas a lo mismo pero sin que ocurra nada realmente, ni en la trama ni en la relación amorosa de los protagonistas. Cuando llevaba más de la mitad, me preguntaba si pasaría algo interesante o no, puesto que a esas alturas no había ocurrido nada relevante todavía, ningún giro sorprendente, ninguna aventura que destacar entre la pareja... Todo esto hizo para mi que la historia flojeara, no me pareció una pareja sólida, que tuviera conexión y, por consiguiente, me aburrió mucho. 

La relación entre Isabel y Nick se da en cuatro o cinco días, no es un amor que se va cociendo poco a poco, más bien es precipitada y el desarrollo de la atracción entre los protagonistas es bastante irregular. Es una relación muy insulsa sin "chicha ni limoná".

Isabel me pareció una protagonista sosa, irritante, cabezona y bastante petarda en muchos momentos (¡hala, y qué a gusto me he quedado!). De hecho, creo que Nick es un personaje que no logró brillar todo lo que hubiera podido por causa de ella, que lo arrastró hasta su terreno de "soserío". Ni siquiera me pareció emocionada cuando al fin consigue cazar al maromo para ella. Y me da rabia, porque todo esto ha hecho que el protagonista masculino no se luzca como él se merecía. 

Otra cosa que no me gustó nada es que se pasan gran parte del libro disculpándose y tampoco ayudó a suscitar mi interés el hecho de que toda la trama se desarrolla casi en su totalidad en la casa de Isabel, pues esto se me hizo repetitivo y cansino.

En fin, es una pena pero este libro ha significado para mi una lectura decepcionante y aburrida, de la que no he logrado disfrutar casi nada. Tampoco puedo destacar ni diálogos ni situaciones divertidas que por otro lado, no es que sean garantía para conseguir salvar la historia, pero al menos sí hubieran puesto un toque de humor en el libro y eso es algo que yo suelo agradecer mucho.

De todas maneras, continuaré con el siguiente de la serie que ya me han comentado que es mejor que este. 

Hasta la próxima, nos vamos leyendo!

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