Carlota y el cactus de color rojo, Andrea Longarela (Neïra)

Carlota y el cactus de color rojo

Andrea Longarela (Neïra)

Zafiro - Planeta

Precio: --// 2'84€ (edición digital)

Goodreads

He leído todo lo que ha escrito Andrea hasta ahora, salvo "Amor se escribe con H", y puedo decir que todos sus libros me han gustado; algunos más, otros menos, pero ese estilo fresco y personal sigue muy presente en sus libros.

En esta ocasión, Neïra nos trae una historia sencilla, sin dramas excesivos ni personajes complejos, pero no por ello menos atractiva.

Carlota es una chica de diecisiete años estudiosa, responsable y algo tímida, que acaba de terminar el instituto y ha conseguido que su madre la deje ir de vacaciones por primera vez sola con sus amigas. Es un tanto insegura y se ve intimidada por la personalidad arrolladora de Loreto (la que es su mejor amiga en ese momento) o al menos eso es lo que ella cree porque a mi me pareció una estúpida y una gili*. Loreto es una chica atractiva, la típica persona que destaca allá donde va y Carlota siente que siempre ha estado a la sombra de su amiga.

Esto es justo lo que la empuja a desinhibirse una noche que salen de marcha; por un momento abandona su lado más serio y decide desmelenarse y actuar con más espontaneidad. Cuando su mirada se encuentra con un chico por el que se siente rápidamente atraída, decide tomar la iniciativa y se aventura a pasar una apasionada noche con él.

El fugaz encuentro con aquel desconocido será determinante en la vida de Carlota, porque a partir de esa noche su vida dará un giro impresionante que marcará su futuro. Se sentirá muy sola y perdida, y por culpa de aquella noche perderá muchas cosas por el camino, entre ellas la no-amistad de Loreto (¡bien!). Sin embargo, ganará otras que verdaderamente no tienen precio. 

Incluso se verá forzada a marcharse del lugar donde vive con su madre y mudarse a otro sitio donde empezar de cero para no soportar miradas y desprecios. 

La acción continúa en el presente de la protagonista que acaba de terminar su carrera de periodismo. Es la alumna más brillante, sus notas son excelentes y gracias a eso, su profesor (del que está algo enamorada idílicamente), le consigue un puesto en prácticas en una prestigiosa revista del corazón.

Será entonces cuando Carlota conozca a su supervisor, Gonzalo, un hombre un tanto excéntrico, muy desastre, que usa unas camisetas horribles que siempre llevan algún mensaje disparatado y que tiene una especial predilección por las plantas, sobre todo por los cactus que decoran la ventana de su oficina.

Conocer a Gonzalo será un shock para ella y pondrá toda su vida patas arriba. Ella que creía tenerlo todo bajo control y una vida ordenada, de pronto se verá inmersa en el caos que supondrá conocer a su jefe y darse de bruces con una parte de su pasado que pensaba que tenía superada. 

A pesar de todas las rarezas de él, la atracción que se despierta entre ellos es innegable. Pero Carlota guarda un secreto muy importante en su vida y que protege celosamente, y eso hará que frene los avances descarados de Gonzalo.

A nuestra protagonista le costará adaptarse al ritmo de trabajo de su jefe porque él es muy desordenado e impuntual y ella es todo lo contrario, metódica, puntual y ordenada.

Me han gustado mucho ambos personajes y su relación tan peculiar. Ella tan responsable y madura, y él más loco y despreocupado, pero ambos tan complementados. Aquello de que los polos opuestos se atraen viene como anillo al dedo en este libro porque no pueden haber unos personajes más distintos que ellos dos.

Los secundarios también dan muy buenos momentos, especialmente Basil, que es el mejor amigo de Carlota y la persona que estuvo a su lado (junto a su madre) cuando más falta le hacía sentirse querida y echaba de menos el apoyo de alguien.

Los diálogos son divertidos, ingeniosos y hay momentos de mucha sensualidad y pasión entre los protas; también he disfrutado mucho de los dardos irónicos que se lanzaban el uno al otro y de la tensión sexual que se respiraba en el ambiente de esa oficina. 

En definitiva, Carlota y el cactus ha sido una lectura muy amena y entretenida, creo que es un libro ideal para este tiempo así de vacaciones en el que tal vez nos apetezcan lecturas más ligeras y sencillas sin mucha complejidad, pero igualmente bonitas y románticas. 

Antigua colaboradora del blog

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